Autor, Literatura, Zweig

Tres maestros, Stefan Zweig


Leer a Zweig es siempre un placer. Si además lees textos de Zweig que tratan sobre literatura, más todavía. Pero si en concreto se trata de ensayos sobre de tres grandes autores, no se puede pedir más.

Tres-maestros-ZweigComo ya adelanta el título, la edición agrupa tres ensayos sobre tres grandes escritores de la literatura universal, con el hilo conductor de la genialidad de los tres. El objeto del ensayo es desgranar las particularidades de cada uno de ellos, ofreciéndonos los motivos por los que Balzac, Dickens o Dostoievski han pasado a ser grandes referentes literarios.

Zweig analiza el modo de plasmar la realidad de los tres escritores, acercándose a sus narraciones, desgranando personajes y tramas y sacando a la luz muchos de los aspectos que sentimos cuando les leemos pero que es difícil explicar con palabras.

Cada uno de los autores tiene su ensayo, independiente de los otros dos. Si bien la longitud es muy desigual, el análisis es concienzudo y apasionado. Eso sí, de los tres la que destaca es la parte del ruso, tanto por extensión como por profundidad.

Durante toda la lectura uno se da cuenta de lo fácil que le resulta a Zweig explicar y analizar el ambiente, los personajes y las tramas de las principales historias. Lo que a cualquiera simplemente le subyugaría y le dejaría con la boca abierta, para él resulta sencillo explicar su modo de ver la realidad y cómo consiguieron plasmarlo en el papel. También sabe narrar desde el punto de vista del lector, lo que uno siente al enfrentarse a su lectura.

Trate el lector de recordar en qué época del año, en medio de qué paisaje, se desarrollan sus grandes obras, Crimen y castigo, El idiota, Los hermanos Karamázov, El adolescente. ¿En verano, primavera u otoño? Quizás en algún lugar lo dice, pero el lector no lo nota. No se respira, no se saborea, no se adivina, no se vive. Todas sus obras se desarrollan en algún rincón oscuro del corazón que los rayos del saber iluminan esporádicamente, en la cavidad vacua del cerebro, sin estrellas ni flores, sin quietud ni silencio.

Página 172

A fin de cuentas el austriaco no sólo es un crítico de literatura, sino también un fervoroso lector que ha disfrutado y sufrido tanto como nosotros, que se acerca a las tres figuras con devoción, respeto y admiración, que es capaz de ser objetivo contando el estilo y la trama pero también el ardor que sentimos, la incertidumbre, el dolor que rasga conforme vamos leyendo.

En resumen, Tres maestros es una lectura muy enriquecedora, que nos acerca a las tres figuras pero que exige que conozcamos las obras a las que se refiere para poder captar toda la información (además de que se desvela parte esencial de sus novelas y argumentos).

Libro interesante, edición bonita, autor de los que hay que leer. Os lo recomiendo encarecidamente.

FICHA:

Te gustará si te gusta
  • Stefan Zweig, tanto en su faceta literaria como ensayística.
Pros
  • Cómo es capaz de explicar las sensaciones que nos sugiere el texto.
Contras
  • Si no hemos leído las novelas a las que se refiere nos perderemos en el análisis.

Namaste.

9 comentarios en “Tres maestros, Stefan Zweig”

  1. De Zweig me gusta todo. De este me he leído solo la parte de Dostoievsky. Otro con el título Tres poetas de sus vidas, es también muy bueno, de este me he leído la parte de Tolstoi. Sí, me gustan mucho los rusos, sí. Gracias por compartir tu lectura. Un saludo

    Me gusta

    1. Coincidimos en eso también, Esther. Me gustan mucho los rusos (más Dostoievski que Tolstoi), y leer a Zweig es siempre un placer, sea en ficción o en ensayo.

      Gracias por pasarte. 🙂

      Me gusta

    1. Creo que no te va a defraudar, Ana. Leer a uno de los grandes escribiendo sobre los más grandes es un placer. La edición también es muy buena. ¡Gracias a ti por pasarte y comentar! 🙂

      Me gusta

    1. Te quedan muchas cosas buenas por leer, Araceli. Te recomiendo «Novela de ajedrez» o «Mendel el de los libros». Tienes todas las reseñas en el apartado «mi biblioteca», para escoger próximas lecturas de Zweig. También tengo apuntado «La impaciencia del corazón», espero que te haya gustado. 🙂

      Me gusta

Deja un comentario