Autor, Literatura, Saramago

El evangelio según Jesucristo, Saramago


Como ya os comenté en el último IMM, recibí este libro gracias a los amigos de Popular Libros.

Hacía mucho que no leía nada del portugués, y debido a que alguien me lo recomendó (creo que fue Dolmar) y que además estaba en mi lista de deseos de anobii, decidí que había llegado la hora de leerlo.

 

Jano durmiente mientras Portugal se apoya en sus carnes magras
Jano duerme mientras Portugal se apoya en sus carnes magras

La novela trata, como ya os habréis podido imaginar por el título, de Jesucristo. Es, básicamente un relato que nos cuenta todos los pormenores de la vida de Jesús.

Si me seguís por twitter, ya sabréis qué viene a continuación.

En fin, que allá voy.

El inicio es una pesadez. Muy denso. Un peñazo. Hasta el punto de plantearme dejarlo. Hasta el punto de mirarlo de reojo pensando ¿cuándo se acabará esto? Si habéis leído algo de Saramago, ya sabréis a lo que me refiero: párrafos infinitos, conversaciones indirectas separadas por comas, capítulos larguísimos, muchas descripciones… pero es que además, el planteamiento del autor, que se suponía chocante y sorprendente, no me estaba pareciendo revolucionario de ningún modo. Más bien algo razonable.

 

Ahí estaba yo pensando que con Saramago me estaba pasando como con Eco, que me gustaba pero que a partir de ahora tendría que ir pensando en sacarles de mi lista de autores con los que seguro disfruto.

 

Ahí estaba yo hasta que llegué a la página 300, con pocas fuerzas, mucha paciencia y pensando en que destriparía el libro aquí. Y fue una conversación, la de Jesús con un Pastor (sí, así, con pe mayúscula), la que me reconcilió pensando que igual Saramago se había dejado lo mejor para el final.

 

Ilusa, pensaréis muchos de vosotros. Pues no, esas 200 páginas finales justifican que no haya dejado el libro a la mitad.

 

He estado pensando cómo mostraros por qué me ha parecido bueno. Y he decidido poneros algunos de los fragmentos que más me han gustado. Por tanto, para los que queráis leer el libro, lo siguiente será un spoiler (sobre todo el segundo párrafo). Si por el contrario no os gusta Saramago o no lo queréis leer o quizá queráis comprobar si os gusta lo que voy a poner, seguid leyendo. Ahora, luego no vengáis diciendo que no os avisé:

 

Y ahora, ante el pastor arrodillado, con la cabeza baja, las manos así posadas en el suelo, levemente, como para hacer más sensible el contacto de cada grano de arena, de cada piedrecita, de cara retícula ascendida a la superficie. (…) Cuando Pastor se levantó, le preguntó, Por qué haces eso, Me aseguro de que la tierra continúa estando debajo de mí, Y no te bastan los pies para tener la certeza, Los pies no perciben nada, el conocimiento es propio de las manos, cuando tú adoras a Dios no levantas los pies hacia él, sino las manos, aunque podrías levantar cualquier parte del cuerpo, hasta lo que tienes entre las piernas, si no eres un eunuco. Jesús se ruborizó violentamente, la vergüenza y una especie de temor lo sofocaron, No ofendas al Dios que no conoces, exclamó por fin, y Pastor, acto seguido, Quién ha creado tu cuerpo, Dios fue quien me creó, Tal y como es y con todo lo que tiene, Sí, Podría Dios rechazar como obra no suya, por ejemplo, lo que tienes entre las piernas, Supongo que no, pero el Señor, que creó a Adán, lo expulsó del paraíso y Adán era obra suya, Respóndeme derecho, muchacho, no me hables como un doctor de la sinagoga, Quieres obligarme a darte las respuestas que te convienen, pero yo, si es preciso, puedo recitarte los casos en los que el hombre, porque así lo ordenó el Señor, no puede, bajo pena de conmutación y muerte, descubrir una desnudez ajena o la suya propia, prueba de que esta parte del cuerpo es, por sí misma, maldita, No más maldita que la boca cuando miente y calumnia, y ella te sirve para alabar a tu Dios antes de la mentira y después de la calumnia.

 

Pero sí me puedes ayudar, Ayudar a qué, A a ampliar mi influencia para ser dios de mucha más gente, No entiendo, Si cumples bien tu papel, es decir, el papel que te he reservado en mi plan, estoy segurísimo de que en poco más de media docena de siglos, aunque tengamos que luchar, yo y tú, con muchas contrariedades, pasaré de dios de los hebreos a dios de los que llamaremos católicos, a la griega, Y cuál es el papel que me has destinado en tu plan, El de mártir, hijo mío, el de víctima, que es lo mejor que hay para difundir una creencia y enfervorizar una fe.

 

Así que mi conclusión es clara: me quedo con una sensación agridulce. El final me ha gustado, pero ¿tantas páginas anteriores pasándolo mal para que me guste sólo un parte? Lo cual significa que me alejaré de todos los libros de Saramago que lleven por título cualquiera de los protagonistas de la Biblia.

 

En cuanto a si lo recomendaría, depende de la persona. A determinadas ya puedo decirles que no: como a JL (manifiestate si sigues por ahí). Con otros no sabría deciros: probablemente a Bartleby le gustaría. En cualquier caso, tened en cuenta que no es una lectura fácil. No sirve leer un ratito un día y otro poco otro. De esa forma el libro no va a ningún lado. Cuando conseguí pillarle el truco fue cuando leí cien páginas de golpe. Si ya habéis probado con Saramago y no os gustó, no lo intentéis con éste.

 

FICHA:

 

Te gustará si te gustó
Pros
  • Los diálogos finales.
Contras
  • Se hace denso y pesado hasta la mitad del libro.
  • Desde mi punto de vista, le sobran páginas.

 

Namaste.

P.D. Efectivamente, este que os enseño es Jano. Andaba cabreado conmigo porque hace ya mucho tiempo que aparecieron por aquí Europa y Portugal. ¡Cuenta saldada, R.! 🙂

27 comentarios en “El evangelio según Jesucristo, Saramago”

  1. ¡Qué carnes magras más bonitas!

    Cuando tenía a las dos misis, me regalaban estas posturitas de vez en cuando, en algún rato que no se estuvieran pegando, claro.

    Del libro, definitivamente, no, no tengo paciencia.

    Me gusta

  2. Mmmm… Probablemente me gustaría… Puede que lo lea, la verdad, aunque quiero leer antes «Ensayo sobre la ceguera». A decir verdad todavía no me he estrenado con Saramago, a pesar de que es premio Nobel, ha muerto no hace mucho y demás. En principio por el título el libro me interesa, pero si a ti te ha hecho sufrir, no sé yo. Está bien a veces eso de que el martirio inicial acabe compensando. Te queda la sensación de que el suplicio ha merecido la pena. Con Sebald me ocurre algo parecido, ahora que lo pienso. El segundo párrafo no lo leo (yast in quéis).

    Me gusta

  3. El famoso libro que se e hizo la bola… No y no y no…
    Un día leeré el Ensayo sobre Ceguera… y no pienso «saramagonizarme» más;)

    Por cierto, tus feli(z)nos… preciosos;)

    Me gusta

  4. Pero qué cosas más monas!!!!!!!! La reseña me deja un poco fría, no la reseña, que te ha quedado estupenda y maravillosa como todas las que haces, oh, gran gurú sabia… Bueno, eso que no tengo claro que me vaya a gustar o no, porque me gustó Ensayo sobre la ceguera, pero no sé si aguantaría otro libro igual.

    ¡Un beso!

    Me gusta

  5. Sólo he leído de Saramago Memorial del convento, así que no puedo comparar mucho sus obras. Ahora bien, por lo que recuerdo del memorial y tus impresiones sobre éste, veo que el estilo del autor se mantiene en sus novelas. Me pasó algo parecido a tu experiencia. Empiezas a leer y no te enteras de mucho hasta que le coges el tranquillo y le dedicas su tiempo. Una pena lo de las 300 primeras páginas.

    Muy buenos los fragmentos que has seleccionado. Es algo que muchísima gente sigue negándose por encima de todo a discutir.

    #Alfinpasastelabola! 😀

    ¡Besos!

    P.D.: ¡Quién fuera gato para retozar y dormir a pierna suelta con tanto gusto! ;P

    Me gusta

  6. Los gatines preciosos, pero por el libro me parece que paso, que ya tuve bastante con Caín xDD. Me parece que este no me iba a gustar, en parte por mi reciente experiencia, en parte por tu reseña tan sincera.

    ¡Un abrazo!

    Me gusta

  7. Q monos los gatos! En cuanto al libro yo lo dejé a la mitad más o menos es que no podía más y eso que me encanta Saramago y he leído muchos libros suyos, pero con este no pude. Ahora me picas la curiosidad con lo de que el final lo compensa, no me animo a leerme los párrafos que has puesto por si lo retomo, aunque lo dejé hace tanto tiempo que tendría que volver a leerlo desde el principio horror! En fin, dilema planteado ¿leerlo o no leerlo? Un besazo

    Me gusta

  8. Te he leído muy atentamente. Así como los párrafos seleccionadoa. He llegado a la conclusión de aue si era un libro de los que no quería tardar mucho en leer, ahora, ya no va a sed cuestión de tiempo. Creo que antes quisiera haber leído el Nuevo Testamento.
    Muy útil esta entrada. Un abrazo

    Me gusta

  9. Todavía no he leído nada de Saramago y, no sé muy bien por qué, no me atrae demasiado. Este libro está en casa de mis suegros y nunca me he animado a leerlo y después de tu reseña creo que voy a seguir así. Tienes tres gatos?? Madre mía, yo con uno ya voy servida, jeje. Son una preciosidad, me ha encantado la foto!! Muchos besos!!

    Me gusta

  10. Me encantó «Ensayo sobre la ceguera» pero quizá este se me hiciera más pesado… eso sí, si el final merece la pena, al menos no te has quedado fría del todo. Me encanta el gatuchi 😀

    Me gusta

  11. Voy leyendo justo por el párrafo que has incluido. El principio también me pareció pesado, sobre todo porque la historia es demasiado conocida. Sin embargo, ahora mismo me está gustando, es puro Saramago, aunque no sé qué pasará cuando lo termine, ya lo reseñaré. La literatura de este hombre me encanta…
    Un beso.

    Me gusta

  12. ¡Qué chasco! Tenía -tengo aún, a pesar de todo- unas ganas tremendas de leerlo. Parece ser que este libro fue tan polémico en Portugal que le prohibieron presentarla a un concurso literario internacional, el Premio Europeo de Literatura «para no herir la sensibilidad de los católicos portugueses» y esto supuso una ruptura entre el escritor y su país. De hecho se vino a vivir a España en un autoexilio desde aquel momento. Toda esta polémica hacía que me resultara atractivo.
    Saramago es muy difícil de leer, yo sólo he leído un libro suyo, «Caín», pero me gustó tanto que pienso repetir en cuanto pueda y, a pesar de que tiene como título un nombre bíblico, te lo recomiendo encarecidamente. Si consigues superar la dificultad de su estilo, te ríes bastante.
    Un saludo.

    Me gusta

  13. Desde luego tus gatos deben ser los más felices y mejor tratados de buena parte del mundo, no hay más que verlos dormir a pierna suelta y lo gordotes que están. Buena foto me gusta. Y muy buenas también las reseñas y comentarios que haces sobre literatura. Sigue así. Besos.

    Me gusta

  14. Pues lamento muchísimo que no te haya gustado, al menos, tanto como a mí. Será que me llama más la literatura densa que la que se lee en un plis plas. O será que yo, por no hacer, ni siquiera hice la comunión y muchas cosas trilladas para los demás, para mí no lo son. ¡En fin! A mí me encantó la crítica que hace a la Iglesia, que no a los practicantes, cosa que es difícil de compaginar.

    Menos mal que no seguiste mi consejo de leer a Calvino. Demasiada responsabilidad.
    Un beso.

    Me gusta

  15. Uno de mis mejores amigos es un enamorado de Saramago… y en el instituto no paró de recomendarme «Ensayo sobre la ceguera», pero nunca me convenció y al final nunca lo leí. Si me animo con Saramago, pienso que le debo empezar por ese libro, pero tras leer esta entrada, y aún a sabiendas de que lo mismo los libros ni se parecen, creo que lo hundo más en mi lista de prioridades…

    Jano es mi ídolo!! Eso es dormir y el resto es cuento!!

    Me gusta

  16. Muy tierna la foto de tus gatos, yo tuve uno de chico durante dos años pero el pobre me tenía tirria, ellos que son tan independientes y yo que soy tan dominante, al final cuando lo regalaron creo que me sacó la lengua. Sobre el libro, pienso leerlo porque me crea curiosidad lo que tenga que decir Saramago, teniendo en cuenta que fue no sé si ateo o agnóstico. Un abrazo.

    Mario.

    Me gusta

  17. La Hier, te he asignado el número 18. Pero al ir a emparejarte con las caritas,he visto que ¡no estás entre los seguidores! Sé que lo eres, pero ¡no estás!

    Ya que estoy aquí aprovecho para decirte que Amélie también me encanta, ¡se me había olvidado que bien vale para eso! tiene el encanto para levantarte el ánimo, ¡ya lo creo!. El libro del pentateuco de Isaac ya lo tenía anotado por tí, y el proceso de Kafka es también uno de los pendientes. Ahora que me dices que es de los que releerías una y otra vez, los miro con mucha más coquetería. Gracias, querida.
    Un abrazo.

    Me gusta

  18. Loque: los míos se pasan el día así, como en la foto. Unos amontonados con los otros… buen vida la de gato…

    Bartleby: sí, definitivamente mejor que empieces con “Ensayo…”. Es un buen libro, además de la obra más famosa del portugués. Si luego ya ves que te gusta, puedes leer este. Aunque “Todos los nombres” me gustó mucho más que este, la verdad…

    Karo: preciosos y gordos… un día de estos me atacan cuando vaya a echarles la comida… ay, menos mal que la bola pasó… jajaja.

    Lady Boheme: jajaja, cuánto me gusta que me hagan la pelota… 😉
    El estilo es el mismo. Lo que cambia es el tema del que habla. Y bueno, la historia en general la sabemos, no es hasta la mitad donde Saramago empieza a innovar un poquito…

    Domi: hablan muy bien de ese que comentas… pues yo he leído tres suyos, y el estilo es el mismo. Tenía muchas ganas de terminarlo, la verdad…

    Pues sí, menuda vida se pegan (por lo menos los míos)

    Carol: habiendo leído “Caín”, ya sabrás que los tiros van por ahí… así que si no te gustó, no merece la pena que lo leas.

    Carol: sí que estás en un buen dilema… porque empezarlo desde el principio ya suena mal… pero claro, leer los fragmentos y luego pensar en que no deberías de haberlos leído… no sé, yo creo que si ya le has dado una oportunidad, has sido justa. Otra cosa es que lo intentaras con “Caín”, que aunque es parecido no es el mismo… ¡ya me contarás qué haces al final!

    Icíar: toma ya… pues seguro que el Nuevo Testamento es mucho más denso…
    Ah, ya soy seguidora tuya. No sé si es que antes no era o me dio un fallo o qué. Amélie es preciosa… 🙂

    Goizeder: yo creo que para empezar a conocer a Saramago es mejor empezar por otro libro, ya sea “Ensayo sobre la ceguera”, o “Todos los nombres”.

    Pues sí, tengo tres gatos. 🙂

    Vero: menos mal, porque si no me llega a gustar el final, estampo el libro… jajaja. Son muy majetes los tres… pero claro, qué voy a decir yo…

    Antonio: estaré atenta a tu reseña para ver qué te parece. Me acordé de ti cuando se me hizo bola. No sabía si tu pensarías lo mismo que yo… pero parece que no va muy desencaminada la cosa.

    Ascen: a mi es que todo ese asunto me parece una barbaridad… pero en fin, no sé de qué me extraño. He leído tu reseña de “Caín” y prácticamente lo que comentas se puede extrapolar para este libro. Su visión está desprovista de fe, analizando los hechos desde la razón.

    Sin embargo, (y no quiero contar de más), yo esperaba algo más reaccionario de lo que me he encontrado, la verdad… como pasó todo eso con la Iglesia pensé que él iba mucho más allá. Exageraciones, vamos.

    Entonces yo creo que te gustará este libro. Es curioso y también te ríes en muchas de las conversaciones. Lo que pasa es que hasta que llegas a ese punto, te desquicias un poco… jeje…

    Teresa: dímelo tú… vaya tres… Me alegra que te haya gustado la foto. Gracias por comentar. 🙂

    Dolmar: es interesante cómo lo plantea. Sí que me ha gustado, pero el inicio me pareció muy lento y muy denso. Eso sí, menos mal que no lo dejé a medias. 🙂 Así que gracias por la recomendación. Leeré a Calvino. Tiempo al tiempo.

    JL: me alegra que por mi sutil referencia acabes comentando. 🙂
    No se parecen, sólo por la forma. Y sí, yo te recomendaría empezar por ese. Es un buen libro.

    Eso es dormir, sí señor. Se cabreó un poco al rato, cuando vio que le estaba metiendo el objetivo en el hocico… ¡pero que no se queje, que para eso soy su dueña!

    Mario: ya me contarás qué te parece. Merece la pena leerlo por las conversaciones que se saca de la manga. Son cuanto menos, curiosas. Saludos.

    Me gusta

  19. Hoooola!! me ha gustado mucho esta reseña, es muy sincera. Te ha pasado con esta novela exactamente lo mismo que a mí con Memorial del convento, también de Saramago, al principio fue una densidad que uff, jajaja, pero es que el final es tan bueno que justifica todo, mereció muchísimo la pena.
    Tenía ganas de leer reseñas de esta novela, así que gracias. De Saramago tengo esperando Caín, que será la cuarta obra que leo del autor, y si me gusta después «caerá» esta que recomiendas.
    un besote!!!!!

    Me gusta

  20. Muchas gracias, leer tu post me ha hecho volver a leer el libro porque como tú, se me hizo eterno, difícil de digerir y eso que soy Saramago TEAM, por ejemplo «Caín» es de fácil lectura, al igual que «El Viaje del Elefante», pero este sin duda me aburría y lo retomaba y dejaba, a partir de hoy lo tomaré y haré el esfuerzo por llegar a la página 300, jajaja, ya no continué leyendo para no leer spoilers, pero gracias por los primeros párrafos…

    Saludos

    Me gusta

  21. Aunque se que la reseña es de 2011.. Estoy viajando un poco por tú blog..y buscando lecturas afines, o de las q hace tiempo tengo ganas..yo soy una gran admiradora de Saramago. Leí Ensayo sobre la ceguera, fue como si un rayo me atravesase.. Es increíble, pero no fácil, y seguía más sus artículos que novelas. Inicié varias veces éste libro..y que decirte la introducción a mi me encantó.. Como describe esa crucifixión de Durero, creo q es una obra de arte..lo que ocurre es que lo cojo y suelto, pero por lo que cuenta otra seguidora de tú blog..éste libro fue un antes y un después en su carrera.. Fui criada como cristiana, hoy me siento agnóstica, y quitando la parte religiosa es un reto romper moldes y ver ese Jesús tan bíblico para verlo más humano..un saludo, prometo seguirte más día a día, gran blog. Y encantada de reencontrarme con gente de queleer y retodemeribelgica.. Una pena no siga.

    Me gusta

Deja un comentario